Círculos de Silencio en Valladolid

  La concentración está convocada a las 20.00 horas en la Plaza de la Universidad de la capital vallisoletana, según han informado fuentes de los Círculos de Silencio. Los Círculos de Silencio de Valladolid han convocado este viernes, 18 de diciembre, una concentración en la Plaza de la Universidad con motivo del Día Internacional del Migrante con el lema 'Que Canarias no se convierta en Lampedusa'. La concentración está convocada a las 20.00 horas en la Plaza de la Universidad de la capital vallisoletana, según han informado fuentes de los Círculos de Silencio. Este colectivo quiere denunciar así la situación que se vive en las Islas Canarias con la llegada de migrantes y el sufrimiento de éstos ante la actitud de las administraciones, "que dejan en la intemperie a los que llegan, los tiran como objetos en el muelle de Arguineguín". Por ello, alertan de que en la Comunidad canaria no se puede permitir que se pase por la misma situación que se sufrió hace unos años en

Los Círculos de Silencio de Valladolid han convocado este viernes, 18 de diciembre, una concentración en la Plaza de la Universidad con motivo del Día Internacional del Migrante con el lema 'Que Canarias no se convierta en Lampedusa'. La concentración está convocada a las 20.00 horas en la Plaza de la Universidad de la capital vallisoletana, según han informado fuentes de los Círculos de Silencio. Este colectivo quiere denunciar así la situación que se vive en las Islas Canarias con la llegada de migrantes y el sufrimiento de éstos ante la actitud de las administraciones, "que dejan en la intemperie a los que llegan, los tiran como objetos en el muelle de Arguineguín". Por ello, alertan de que en la Comunidad canaria no se puede permitir que se pase por la misma situación que se sufrió hace unos años en la isla italiana de Lampedusa. Los Círculos de Silencio reclaman que las administraciones aborden esta situación, en la que muchos ponen en riesgo su vida "aunque

   Se siguen oyendo los gritos. Gritos de migrantes ahogándose en el mar y gritos de auxilio para quienes les intentan ayudar. Canarias es un grito del que no podemos dejar de hacernos eco. Solo la empatía nos podrá convencer del sufrimiento de quienes llegan a nuestro país. Primemos la acogida y la integración. Y eso es lo que hicieron en Órzola (Lanzarote), muchos vecinos-as, la noche del 25 de Noviembre, que fueron los primeros en llegar a la orilla de las rocas, formaron una cadena humana, usaron los bidones de gasolina como boyas y comenzaron a rescatar con la única luz de los teléfonos móviles. Estos gritos llegaron a José Antonio, un carpintero jubilado, que sin saber nadar, trajo a tierra a varios supervivientes. Cuenta su familia que al volver a casa pasó doce horas mudo. Estaba en estado de Shock. Eran gritos desgarradores. Y frente a la hospitalidad del pueblo, la actitud de las administraciones, que dejan en la intemperie a los que llegan, los tiran como objetos en el